En las hormigas (Formicidae), las mandíbulas constituyen una herramienta fundamental y realizan con ellas una amplia gama de funciones, las más importantes: manipulación de objetos, procesado de alimentos, caza y defensa.
Están muy especializadas y presentan formas muy diversas, variando en forma y tamaño.
MÁRGENES Y DENTICIÓN
Una mandíbula típica se divide en márgen externo (Mex) y margen interno (Min).
El márgen interno se divide a su vez en margen basal (Mba) y margen apical o margen masticador Mma.
El margen basal se curva en un ángulo llamado ángulo basal (anb) hacia el margen masticador, que está por lo general provisto de dientes (die) y/o dentículos, que son dientes pequeños (dti). El diente más distal se denomina apical (dap) y el anterior preapical (dpr), mientras que el más proximal se llama basal (dba) y el siguiente prebasal (dpb). Los dientes se numeran desde el extremo de la mandíbula. Es decir el diente apical será el primero.
Por lo general en el margen basal no se presentan dientes, aunque en algunos casos están presentes y cuando existe un espacio grande sin dientes entre los dientes o dentículos, se denomina diastema (dia) (fig. A). Los dientes romos y gastados (fig. B) se denominan crenulados, mientras que los dientes estrechos y alargados se denominan espiniformes (fig. C)
Las mandíbulas también pueden presentarse con pocos o ningún diente (edentadas)
FORMA
Por lo general, las mandíbulas presentan forma más o menos triangular, con márgenes basal y masticador bien diferenciados.
Sin embargo, en algunos casos, el margen masticador se alarga bastante y se acorta el margen basal como en el caso de la exótica Harpegnathos venator (fig. A) o de las mandíbulas trampa del género Anochetus, con tres grandes dientes apicales (api) así como multitud de dentículos (dti) (fig. B y C)
En general podemos concluir que las mandíbulas de las hormigas son extraordinariamente variables y de gran importancia taxonómica.